Parte de la utilización de uvas ecológicas certificadas, vendimiadas a mano en el mejor momento de maduración. Esto se refleja en una mayor concentración de antioxidantes, uno de los componentes más beneficiosos para la salud contenidos en el vino.
Se realiza con técnicas de agricultura ecológica, evitando la utilización de productos químicos, abonos minerales y sulfitos. La utilización de uva dañada está prohibida.
Se realiza sin tratamientos de antioxidantes ni antisépticos añadidos. Los tapones de las botellas son de corcho natural y las etiquetas deben especificar de forma clara los ingredientes y su proceso de elaboración. El sello de ‘vino ecológico’ con el que se diferencia a estas botellas permite al consumidor estar seguro de que el producto final y todo el proceso llevado a cabo anteriormente está libre de contaminación y realizado bajo los criterios bio establecidos por la Unión Europea.
